viernes, 28 de mayo de 2010

MUJERES ANABAUTISTAS


Historia del anabautismo (IX) 
 
 Autor: Carlos Martínez García

En la gestación y el crecimiento del anabautismo del siglo XVI las mujeres tuvieron un rol esencial. El anabautismo fue un movimiento popular, y como tal la participación femenina fue amplia, mayor que en cualquier otra expresión de las reformas religiosas que se desataron en Europa a raíz de la rebelión encabezada por Martín Lutero.




En el anabautismo suizo, al que nos hemos referido en artículos anteriores de esta serie, se dio importancia a la acción del Espíritu Santo en la vida de los creyentes, varones y mujeres por igual. Por tal razón hicieron suya la enseñanza de que el Espíritu se derramaba traspasando barreras de clase, educativas, generacionales y de sexo. Las mujeres, desde el entendimiento que los anabautistas tenían de la Biblia, eran también sujetos del accionar del Espíritu Santo.

Dado que en el anabautismo se enfatizaba la conversión personal, el bautismo como expresión pública del compromiso de seguir a Jesús, y la realidad de la Iglesia conformada por creyentes; las mujeres que hicieron suyas las anteriores enseñanzas encontraron que las mismas les proporcionaban principios para ejercer voluntariamente sus creencias y no las impuestas por la simbiosis Estado-Iglesia oficial y/o por el clan familiar.

Como integrantes de un movimiento gestado desde abajo de la sociedad, las mujeres anabautistas padecieron una triple marginación. La primera por ser mayoritariamente pobres. La segunda por ser mujeres en una sociedad dominada por el patriarcado. La tercera por haber elegido identificarse con una “secta perniciosa”, demonizada por las autoridades religiosa y políticas.

Lo que sabemos de las mujeres anabautistas del siglo XVI proviene mayormente de las actas de los juicios que debieron enfrentar. Raramente dejaron testimonios escritos por ellas mismas, ya que la mayoría no sabía expresarse por escrito o lo hacía de manera muy rudimentaria. Las actas de esos juicios revelan el carácter, las creencias y redes relacionales de esas mujeres. Pero también denotan las estigmatizaciones, el reduccionismo y las burlas de quienes las juzgaron y sentenciaron al exilio, pagar multas o a la muerte.

El libro coordinado por C. Arnold Snyder y Linda A. Huebert (Profiles of Anabaptist Women: Sixteenth-Century Reforming Pioneers, Wilfrid Laurier University Press, 1996, séptima reimpresión 2008), es una herramienta imprescindible en el rescate de la memoria de varias mujeres que decidieron incorporarse a las filas de un movimiento perseguido. Ambos tienen razón cuando escriben que el “hacer visible las vidas de mujeres del pasado nos beneficia a todos, ya que así brindamos un necesario balance en la memoria histórica de la humanidad”.

Al enfatizar, en el anabautismo, la acción del Espíritu Santo como el agente central en la interpretación de Las Escrituras, esto significaba que una persona llena del Espíritu, ya fuese letrada o analfabeta, podría ser un exegeta verdadero (varón o mujer) frente a un docto teólogo pero carente del Espíritu Santo. Esto escandalizó a los círculos del establishment político y religioso, donde consideraron una afrenta que sencillos varones y mujeres, pero sobre todo mujeres, tuviesen la osadía de encarar a bien preparados eruditos y poderosos señores.

Las mujeres anabautistas ejercitaron la memoria para aprenderse versículos, muchos versículos, de la Biblia. En las actas de sus enjuiciadores quedaron plasmadas sus respuestas cuando eran cuestionadas sobre por qué rechazaban el bautismo de infantes, cómo es que en reuniones caseras practicaban la Cena del Señor en dos especies, pan y vino; qué afirmaban al pedirles cuentas acerca de su desobediencia a las autoridades y sus ordenanzas. Ellas simplemente citaban sobre todo secciones del Nuevo Testamento, para afirmar que su obediencia se la debían a Jesús y sus enseñanzas.

Más que los varones, las mujeres anabautistas, por carecer en su mayoría de la habilidad lecto/escritora, fueron eficaces transmisoras orales del núcleo de creencias que caracterizaron a su movimiento. Muchas de ellas potenciaron sus capacidades cuando se convirtieron y adquirieron, como veremos en nuestro próximo artículo, un poder ejercido por un reducido sector (conformado mayoritariamente por varones) de la población en el siglo XVI, nos referimos al poder de la lectura. Con ésta habilidad, quienes se hicieron de ella, acrecentaron su independencia de los centros que normaban y administraban las creencias de la población en un territorio dado.

Como individuos, en una sociedad dominantemente corporativa, las mujeres anabautistas eran llamadas a ejercer una fe consciente y desarrollar un discipulado personal. Debían responder personalmente y no su padre, esposo o guardián por ellas. Al elegir por ellas mismas una comunidad de fe, estaban rechazando el principio eclesiológico, y político reinante en el siglo XVI, el de que según la religión del rey es la religión del pueblo (cuius regio, eius religio). Porque en el anabautismo nadie podía ni debía imponerle la fe a otro ni a otra.

Los datos muestran que en el siglo XVI del total de anabautistas martirizados por lo menos un tercio fueron mujeres. En regiones de Europa donde la persecución fue más cruenta, y en determinados periodos de tiempo las mujeres anabautistas ejecutadas representaron el 40 por ciento. Fortalecidas en su fe las mujeres eligieron la tortura y/o la muerte, cuando ante ellas también estuvo la posibilidad de retractarse en los juicios y evadir así la pena capital. De algunos casos nos ocuparemos en nuestra próxima entrega.


Artículos anteriores de esta serie:



1
Historia del anabautismo
2
Cómo surge el anabautismo
3
Anabautistas bajo persecución
4
El difícil desarrollo del anabautismo
5
Vida y muerte de Jorge Cajakob
6
Miguel Sattler
7
La Confesión de Schleithei
8
Tras la Asamblea de Schleitheim

Artículo editado en "Protestamte Digital.com" España 2010.

Carlos Mnez. Gª es sociólogo, escritor, e investigador del Centro de Estudios del Protestantismo Mexicano.

viernes, 21 de mayo de 2010

TESTIMONIO DEL"DIA MUNDIAL DE LA ORACION" POR REBECA GONZALEZ

Apreciables Hermanas
El dia 14 de mayo llevamos acabo nuestro  El dia Mundial de Oracion con la liturgia sugerida, en la Iglesia Seguidores de Cristo. El encuentro fue enriquecidio por la intervenciòn de tres mujeres que representaron a los paises sugeridos (Haiti, Colombia y Mexico) cada una de ellas se preparo con informaciòn y hablando en primera persona nos hicieron sentir participes del dolor y necesidad que estos paises tienen.  El dialogo y dinàmica de participaciòn fue de mucho aprendizaje y de oraciones fervientes nos que motivaron mucho. El grupo de mujeres en esta iglesia  se caracterisa por su gran pasiòn  por participar y compartir, ydecidimos seguir orando por estas necesidades todo el mes en nuestros encuentros semanales.
Estas iniciativas de realizar a la distancia acciones como esta nos unen y van creando un sentido de pertenencia, no nos cansemos de seguir adelante y que la gloria sea para nuestro Dios.
Mil bendiciones para todas


"Dios ... ¡Sí, bendice nuestro trabajo! ".  
Salmo 90:17

NOTICIAS DESDE " COSTA RICA"

ENCUENTRO  DE MUJERES 
Les estoy enviando un breve informe del 
encuentro de mujeres menonitas a nivel 
nacional que celebramos recientemente en 
Costa Rica, despuès de treinta años 
de no hacerlo de esta manera.
Fue un tiempo realmente muy hermoso y 
la evaluaciòn que hicimos entre las 
participantes nos tiene muy animadas 
para organizarnos ya para el 
pròximo año.
 
Sandra Campos
 

¡BENDICIONES DE PENTECOSTES!

Epirítu: en hebreo, Ruaj (palabra femenina).

Espíritu Santa


Recio cual viento vivificante que alienta al alma cuando cruda la vida pasa y esperanza anhela…

Ufano rostro invisible de la utopía realizante en la voz que clama y el pregón que transforma,

Alma del cosmos que late, crece, se reproduce y se niega a morir…

Justicia palpitante del Reino que desciende como, el Espíritu que, antaño a la iglesia juntó… como la gallina que revolotea sobre sus polluelos para luego expulsarlos de sí con palabras ajenas de liberación.


Rev. Dan González Ortega

Pentecostés 2010

México

CRONICA DEL DIA MUNDIAL DE LA ORACION DESDE MEXICO

El domingo antepasado celebramosel DMO en la iglesia Fraternidad Cristiana, Prensa Nacional.



Dos hermanas de esta iglesia participaron junto conmigo en la celebración, también otros hermanos y hermanas. Fue muy conmovedor escuchar las voces juntas intercediento al Señor por las mujeres y los hombres de nuestra querida Latinoamerica y por supuesto de todos los que estan siendo victimas de la extrema violencia y marginación.

Ofelia García

domingo, 16 de mayo de 2010

CRONICA DEL "DIA MUNDIAL DE ORACION" POR LAS MUJERES DE AMERICA LATINA


Reunión de Mujeres

Iglesia Menonita de French
Sábado 8 de mayo

Esta reunión fue especial porque conmemoramos el “Día Mundial de la Oración por las Mujeres Latinoamericanas”.
La lectura Bíblica que compartimos fue Jeremías 29: 12-13. “Entonces me invocareis y vendréis y orareis y yo lo oiréis;
Y me buscareis y me hallaras, porque me buscaras de todo corazón”
Nos congregamos para orar por todas las mujeres de Latino  América, poniendo énfasis en el tema de la violencia hacia la mujer (madres, abuelas, hijas, nietas y hermanas) que son victimas de maltrato físico, mental y psicológico. También oramos por nuestras niñas/os y adolescentes que están sufriendo agresiones en sus casas o en las escuelas algo tan común en estos días.
Pusimos especial atención en los países como Haití, Chile, Colombia y México. Tres hermanas fueron contando con ayuda de cartelones con fotos y figuras el tipo y grado de violencia que sufren las mujeres en estos países. Por ejemplo en Chile y Haití por  terremotos y tsunamis muchas familias perdieron algún familiar y sus viviendas, además las secuelas que acarrean, falta de alimentos, ropa y enfermedades.
En Colombia familias desplazadas, algún miembro muerto o desaparecido por la guerrilla o los paramilitares y en México en especial en Ciudad Juárez por el grado de violencia que sufren niñas, adolescentes y obreras que son brutalmente violadas, torturadas y muertas con la complicidad de los que ejercen el poder.
Después de orar por cada país prendimos una vela dando gracias a Dios, confiando por su misericordia, por su iniciativa de amor trayendo esperanza y reconstrucción a los países destruidos por la violencia.
 Nosotras tratamos de ponernos en sus lugares aún sin conocerlas, entrelazando nuestras manos y nuestras voces, sabiendo que el Señor es el  único que puede traer alivio a estas situaciones difíciles.
Cantamos alabanzas y terminamos con el tema de León Gieco “Solo le pido a Dios”.
Además, fue un día muy especial para algunas hermanas pues habían cumplido años en la semana, compartimos mates y ricas tortas, siendo nuestro lema “Amor y Comunión” y se les entrego unos presentes.
Terminamos la reunión dando gracias al Señor por la bendición de estar juntas y disfrutar con alegría de otra Reunión de Mujeres.
¡Bendiciones!

Fabiana Ambesi.

viernes, 7 de mayo de 2010

POESIA ENVIADA DESDE URUGUAY

Mujeres de la Biblia


 
 Un linaje hay de mujeres

que se extiende desde Eva

Su rol en moldear la historia

Solo Dios lo concibiera

Y aunque por siglos sin fin

Su voz fuera reprimida

De Dios aliento tuvieron

Y al mundo así bendijeron.


Cantemos, pues, de Sara

Quien con risa dio a luz

Y cantemos de Tamar

Que defendió sus derechos

Cantemos también de Ana

Que negoció con su Dios

Y cantemos de María

La que al Verbo concibió.


 Un linaje hay de mujeres

Que opuestas a poderosos

En defensa de la vida

Las leyes han desafiado.

Y aunque el triunfo que lograron

Reconocido no fuera

Por gracia de Dios crecieron

Valientes, creativas y enteras.


Cantemos de Sifra y Fúa

Que enviadas a matar

Recién nacidos varones

La orden del rey violaron.

Y cantemos de Rahab

Que a los espías guardó

Y también de Ester, la reina,

Que un genocidio impidió.


 Un linaje hay de mujeres

Que fiel a Jesús anduvo

Lo acogió en su ministerio

Y en su muerte lo sostuvo.

Aunque en ellas no confiaron

Cuando su resurrección clamaron

Hasta que a él mismo lo vieron

Entre ellos levantado.


Y cantemos, pues, de Ana

Que el rostro del Niño viera.

Y también de aquella Marta

Que alimento le sirviera

Y de todas las Marías

Que sus palabras guardaron

A su mesa hoy invitadas

Por nuestro Dios de justicia

Como huéspedes amadas.

Texto de John L. Bell y traducción libre de

Milka Rindzinski.

martes, 4 de mayo de 2010

Queridas lectoras/es compartimos una reflexión que llegó de México, escrita por un pastor Menonita

¡Nos urgen santos revolucionarios!
Victor Pedroza Cruz
 
“Hoy se necesita una mezcla del santo y el revolucionario,
Esto es, hombres y mujeres que posean simultáneamente
La humildad y la pasión del santo clásico y la “entrega” y
el realismo político del revolucionario” Arthur Koestler
 
Recientemente me impactó la opinión de un sociólogo, que al hablar sobre el incremento de la violencia y el imperio del narcotráfico entre los jóvenes de México, dijo: “se necesitan modelos, pero no los hay. Modelos de autoridad moral y de congruencia de vida, pero no los hay. ¿A quién entonces, recurrirán los jóvenes?” Yo desde luego pensé en nosotros, los cristianos evangélicos que nos ufanamos de poseer la Verdad. Pensé en el estado actual del movimiento evangélico y pensé sobre todo, en los hombres de corbata fina que lo dirigen.
 
Como pastor, maestro, consejero y terapeuta pensé en todos aquellos casos de abusos sexuales,  manipuleos psicológicos,  chantajes religiosos, robos de las ofrendas y  fraudes con los bienes de las iglesias, donde he tenido la enorme responsabilidad de intervenir para traer la paz y la restauración, pero donde lo que menos se quiere es arrepentirse y pedir perdón.
 
Pensé en personas lastimadas, iglesias heridas y deshechas y pensé en la gran religiosidad y espiritualismo con que pretendemos tapar nuestros pecados.
 
El movimiento evangélico mexicano no está muerto, al contrario vive y sigue en ascenso, cada día deseando ser más y más y un día, por qué no, convertirse en la iglesia mayoritaria  (¡Dios no me permita ver ese día!).
 
Hay un activismo imparable entre nosotros “congreso” tras “congreso” (por cierto que, en mi corto entender, yo entiendo que un Congreso es donde se van a exponer temas que quedan a su vez sujetos al análisis, la crítica, la discusión, la corrección y el acuerdo. Pero en los llamados “congresos” cristianos sólo se va a recibir “mas de lo mismo” y es imposible interpelar al que expone, pues no se puede estar en contra del “ungido del dios”), ¡Y todo gira en torno a la prosperidad y al éxito!
 
Líderes de éxito, iglesias de éxito, mujeres de éxito que ocupan asientos según puedan pagar: “reinas”, “princesas” y “guerreras”, pastores exitosos v.i.p., proyectos de éxito. El cristianismo ha mutado a ser una sociedad exitista y efectista obnubilada por mammón. ¡El pragmatismo más rapaz campea entre nosotros!, y a ese pragmatismo se le cubre de “Visión” (con V), ¡hasta hay cursos que enseñan como tener visión! Luego los prosélitos de esos personajes van a aprendiendo de sus maestros a ser “profetitas” y “apostolitos” pero, ¡son insoportables por su arrogancia y soberbia! A veces cuando estoy en una empresa u oficina veo dos placas en algún lugar: “Nuestra misión y nuestra visión”, luego cuando voy a las iglesias veo las mismas placas. Hace ya muchos años que la educación bíblico teológica ha dejado de marcar nuestros pasos, hoy son los administradores de empresas, financieros, gerentes, expertos en negocios, quienes dirigen los proyectos que, no se si llamar eclesiales.
 
Luego, los cristianos se rasgan las vestiduras por la aprobación legal del aborto o los matrimonios gay; pero no tienen la misma actitud de escándalo por la brutal explotación de unos cuantos dueños del poder y del dinero sobre la inmensa mayoría y que atentan contra la vida. Los evangélicos ya han condenado al infierno a los homosexuales, pero ellos no han resuelto y desde luego no quieren resolver la “cristiana” misoginia, no les preocupa la violencia que los  machos ejercen contra las mujeres, los jóvenes y los niños, ¿Cómo llamar a la conversión (¡conversión en heteros machos y heteros sumisas desde luego!) a los homosexuales cuando son tan intolerantes y homo fóbicos y sus códigos de contaminación y pureza no se los permiten?
 
Luego se escandalizan por lo que llaman intolerancia y persecución religiosa en Chiapas, pero callan cuando los perseguidos le hacen lo mismo a los perseguidores. Otra vez, hacen congresos de espiritualidad extrema (¡sic!) en ciudades azotadas por la violencia del narcotráfico y asesinatos de mujeres, pero no hay ninguna palabra profética contra esas impiedades e injusticias. Se gozan de que haya legisladores “cristianos” los cuales, una vez estando en el Congreso se olvidan del pueblo, se olvidan de todos y sólo sirven a los a los nefandos intereses de sus partidos y todo eso se cubre con una gran manto de religiosidad y espiritualismo.
 
Por eso quede sorprendido por la afirmación del sociólogo aquél y reconocí con espanto que nos faltan paradigmas, es decir modelos vivos.  Santos que no quieran enriquecerse a costa de la iglesia (es decir, de los pobres). Revolucionarios que no anden del brazo con los gobernantes y que no se rompan las vestiduras porque el estado decidió ser laico y no confesional. Santos que no sueñen con su imperio religioso personal (y que no mantengan a sus iglesias en la ignorancia y al analfabetismo bíblico). Revolucionarios que no se sitúen en una esfera de supremacía como extraterrestres inasibles. Santos que no se paseen en hummers custodiados por guaruras y su guardarropa sea de las mejores marcas. Revolucionarios que no abusen del poder y no aterroricen a sus congregaciones con la amenaza de la maldición divina. Santos Que junto con el pueblo sean seguidores de Jesucristo. Revolucionarios que sepan que es hora de dejar de amar el mundo y sus cosas y seguir a Jesús en la vida.
 
¿Es posible? Desde luego puesto que Jesús ya nos marcó el camino. Sin embargo, para fundamentar “bíblicamente” sus “visiones”, prefieren recurrir a los ricos del Antiguo Testamento: Abraham, Jacob, Salomón y Jabes entre muchos, aunque claro, evitarán a Isaías, Miqueas, Amós, Elías y Eliseo. Pero, el Modelo de todos los modelos, para todos los tiempos es Jesús de Nazareth y fuera de El no hay ni habrá otro. Los conversos del Nuevo Testamento y la generación del segundo siglo así lo entendieron.
 
El Maestro no se obnubiló ante el poder la riqueza y la fama. Varias veces tuvo la oportunidad de formar su megaiglesia pero rechazó la idea. Se rehusó al espectáculo público no una, sino muchas veces (“Haznos una señal”). Rechazó  una cultura opresiva e indigna que atentaba contra los pobres, los extranjeros, las mujeres, los niños, los enfermos y los indígenas. Nunca se impresionó ante la pompa y el boato de la religión. Una vez, sentado frente a “un templo digno del Señor” dijo que de eso no quedaría piedra sobre piedra. Se refería desde luego, a la cristalería, las alfombras, las cortinas, los negocios anexos que suelen llamarse “ministerios” iniciando él el derrumbe expulsando a los mercaderes. Nunca recurrió a la violencia pretendiendo resolver conflictos y tampoco echó a los que se le oponían. Tampoco hizo promesas fuera de toda realidad. Ni prometió una vida maravillosa ni la prosperidad económica. En cambio sí, la vida abundante, ríos de agua viva brotando de su interior, una vida llena de sentido y significado. Prometió bautizarnos con el Espíritu Santo y lograr el milagro de una comunidad nueva formada por humanidad nueva. Como ven, no estoy citando versículos, pues es preferible que por un tiempo dejen de oír a los llamados “apóstoles”, vayan a los cuatro evangelios y lo constaten por ustedes mismos.
 
Estoy muy preocupado por el movimiento evangélico. Lo estoy. Pero afortunadamente si existe la comunidad nueva, la comunidad del Espíritu, la comunidad escatológica que sigue al Mesías Jesús en la vida. Esta es la comunidad de las ovejas puestas a su derecha que heredará el Reino de su Padre. Es una comunidad que se distingue por su estilo sencillo de vida que, antes de buscar a los mercaderes que les piden “sembrar dinero, relojes de oro, anillos de diamantes, terrenos, casas para cosechar bendiciones” y que hasta cínicamente dicen: “¿para Dios o para mí?”, La comunidad del Mesías vive entregada en constante donación, renuncia, gozo en el Espíritu Santo, es la comunidad que no teme contaminarse, que busca a todos, que no selecciona. Los pastores de esas comunidades se consideran hermanos, porque la Palabra dice clarísimo que la unción del Espíritu le pertenece a todos los redimidos y los ministerios los ejercen todas y todos. Los pastores y/o pastoras se consideran hermanos de sus hermanos, tendrán quizá un poco más de responsabilidades. Pero su gozo está en ver a las comunidades “creciendo en todo” hacia la estatura de Cristo. Son comunidades en amor desbordado hacia sus prójimos. Tendrán problemas y conflictos, pero los resolverán en amor, buscando el arrepentimiento, otorgando el perdón y restaurando, reconciliando ¡nunca expulsando a los disidentes y pecadores!. Es una lástima que esas comunidades son una minoría, pero existen, porque si no, el cristianismo sería un timo.
 
¿Es tan difícil entender que Jesús es el Modelo para toda la vida?
 
Muy recientemente un grupo de hermanas y hermanos nos organizamos para visitar una comunidad indígena en lo profundo de la sierra negra de Puebla. Hermanos de diversas iglesias evangélicas. Para ir, todos pusieron su dinero, su tiempo, sus talentos. Estuvieron dispuestos al sacrificio de dormir incómodos, no bañarse por tres días, comer poco y lo que había, trabajar muchísimo, médicos, enfermeras, maestras de niños, payasitos, hermanas con el don de repartir con liberalidad, cocineras, etc, ¡que preciosa gente! Visitamos una comunidad indígena no conversa. Ellos, los indígenas, nos recibieron con mucho cariño y entrega y difundieron que “los hermanos llegaron a visitarnos”. Bueno, pero el chofer de nuestro autobús me dijo: “recientemente llevé a un grupo a una convención de apóstoles. Yo veía que cada apóstol además de lo que hacía,  soplar y tirar a la gente llenaban cubetas y cubetas de dinero. Pero ustedes han venido hasta acá para dar, ¡que diferencia!”
 
Jesús dice: “Y el que no lleva su cruz y y viene en pos de mí no puede ser mi discípulo… así pues, cualquiera de vosotros que no renuncia a todo lo que posee no puede ser mi discípulo”.
 
Nos urgen santos llenos de pasión por la oración, la espiritualidad, la alegría de una vida sencilla Necesitamos profetas revolucionarios que mientras anuncian el evangelio del Reino también denuncien el sistema-pecado y no tengan miedo a trastornar el mundo con la ética de Jesús Mesías.
 
Entonces, ¿Cómo responderemos al llamado del Maestro?
 
Victor Pedroza Cruz